EL ORIGEN DEL BELÉN

 

El Belén, también conocido como Pesebre, o como nacimiento, es una de las tradiciones cristianas más conocidas durante las fechas Navideñas. Esta representación del nacimiento de Cristo forma parte de una tradición de la Iglesia y se viene realizando desde hace ocho siglos.

El origen del Belén se le atribuye a San Francisco de Asís (fundador de la Orden Franciscana). En Greccio, en la Navidad de 1.223, San Francisco quiso recrear en vivo la representación del nacimiento del Niño Jesús. Para darle mayor realismo, esparció una gran cantidad de heno y situó un buey y una mula, así como gran cantidad de animalitos.

La idea de reproducir el nacimiento se popularizó rápidamente en todo el mundo cristiano. De los seres vivos se pasó a la utilización de figuras de barro.

A partir de aquí, su uso se extendería en todos los conventos de la orden franciscana qué serían los encargados de exportarlos al resto del mundo. Sin embargo, el gran difusor sería el Papa Juan XXIII.

En Murcia, es muy popular y apreciado el Belén de Francisco Salzillo (s. XVIII).